LA CIUDAD EN EL CENTRO
Por Andrés
Cottini
andrescottini@elpancholacoca.com.ar
Se vienen las elecciones en la ciudad. Es
cantado el ballotage entre Macri y Filmus y, si hay algo que está claro, es que
el kirchnerismo tiene enfrente exactamente eso de lo que se quiere diferenciar.
Por fin, la encarnación de los ’90 se hace cuerpo y mente. El kirchnerismo se
parece más a sí mismo enfrentando a Macri.
La vieja derecha se espolvorea la nariz, se
aplica especias del primer mundo y queda como la nueva derecha “apolítica”,
linda y saludable. Pero eso servía antes. Al PRO ya se lo vio a la mañana, con
ojeras y sin photoshop. La alianza o las grandes simpatías con Duhalde,
Barrionuevo y Vanegas son demostraciones de lo tan derechozo y espurio que es
el asunto.
Por otro lado, más precisamente en la vereda
de enfrente, está el kirchnerismo. Y no sólo eso, están dos grandes referentes
de lo mejorcito del kirchnerismo: Filmus y Tomada. Por eso en estas elecciones,
como en todos los temas que pone en agenda el gobierno nacional, lo que subyace
es el rol del Estado, su alcance e implicancia. Esta vez, hay gestión de ambos
lados.
La
ciudad profunda
Analizando el presupuesto de la ciudad, uno
podría decir que la subejecución presupuestaria remite a una cuestión ideológica.
Así se justificaría que el gobierno PRO haya utilizado solo el 4,7%[1]
del dinero destinado al mejoramiento de las villas, mientras que ejecutó el
14,8% en los servicios de seguridad. Para ser justos, es entendible que los
porcentajes se intensifiquen cuando se llega a fin de año pero 4,8% es una
cifra espeluznante. Con la misma lógica, uno podría decir que el Gobierno de la Ciudad dejó vencer 5
millones de pesos en medicamentos mientras que los hospitales públicos estaban
desabastecidos[2].
Por otro lado, una de las propuestas más
PROfogocitadas en la campaña por la ciudad fue la ampliación de la red de
subterráneos. En la apertura de las sesiones legislativas del 2008 Macri dijo: "Estamos poniendo en marcha el Proyecto
‘Red Nuevas Líneas’ que significará hacer 41,5 kilómetros de
subtes en esta ciudad, creando las líneas F, G, I y E Norte. También
continuamos con la construcción de la línea H y con la prolongación de las
líneas B y A, lo que en un conjunto alcanza 48 kilómetros de
obra”[3]. El
resultado de 4 años de gestión: 450mts.
En el primer cuatrimestre de 2011, para
continuar con los subtes, Macri sólo ejecutó el 0,3% del dinero destinado para
subtes. Esto se da, básicamente porque no están preparadas las licitaciones
para que realicen la construcción. En este punto, no se puede aludir a una
cuestión ideológica. El tema ya forma parte de la ineficacia total incluso para
llevar a cabo esas cosas que la gran mayoría de los habitantes de la ciudad ven
con buenos ojos.
Continuando con los datos, hay uno que es
llamativo. A pesar de la subejecución que también se manifiesta anualmente, la
ciudad contrajo deuda. Al revés de la política de desendeudamiento que se viene
desarrollando a nivel nacional, la ciudad ha contraído deuda por 5.000 millones
de pesos, incluso obteniendo saldos positivos en la balanza[4].
Endeudamiento, ShowMatch y spots publicitarios, así se gobierna.
Hace pocos días, la presidenta Cristina
Fernández aseguró: “Tenemos una política habitacional que nos convirtió en el
gobierno que más viviendas construyó en el país”. Dejando de lado el caso
Schoklender, casi 100.000 viviendas por año. En la ciudad se construyeron 80 en
el 2010, 99.920 viviendas menos. Ni siquiera se llevaron a cabo las que están
financiadas por el plan federal de la Nación[5].
Más
acá y más allá de la gestión
Pero Macri no es sólo gestión. No hay que
olvidarse que el candidato a la reelección de jefe de gobierno está procesado
por cometer un delito más propio de la dictadura que de la democracia:
espionaje. Investigar qué hacen y cómo se mueven referentes sociales y
empresariales. No hay que olvidarse que puso en el Ministerio de Educación a un
defensor acérrimo de
la dictadura militar, de criminalizar la cultura popular del rock y de decir
sin titubeos “reprimir es obligación del Estado”[6]. No hay que olvidarse de la UCEP, Unidad de Control del
Espacio Público, un fuerza parapolicial que desalojaba a través de la fuerza,
la ocupación en plazas y conventillos[7]. Y no hay que olvidarse que
Duhalde está indignado por el rol que están cumpliendo hoy las fuerzas armadas.
También hay que tener en cuenta
que la voluntad de los grandes medios es seguir acumulando dinero y Macri se
los garantiza[8].
Así, desde la tribuna de doctrina y desde el gran diario argentino, se puede
encontrar una consigna que dice algo así: “es necesario una oposición fuerte
para frenar a los dictadores kirchneristas”.
Si bien todavía la derecha no
está lo suficientemente estructurada, se está armando. Macri, un empresario que
nunca salió de Barrio Norte más que para viajar a París, Londres o Punta del
Este, creó un partido que ya tiene presencia en varias provincias y si se alía
con Duhalde, en muchas más. La mirada está en 2015 y conservar la ciudad sería
una forma de seguir acumulando poder para algún día, llevar su plan de gobierno
a todos los argentinos.
[1] Análisis presupuestario en http://www.asap.org.ar/images/stories/file/informesgcba/2011/infoasapgcba1tri11.pdf
[3] Informe promesas incumplidas de Macri de Gonzalo Ruanova,
Legislador de Nuevo Encuentro. http://es.scribd.com/doc/54606295/Informe-Promesas-incumplidas